Entrevista

Domingo, 01 de Julio de 2018 14:51 hrs.

Experiencia, talento y amistad en el arco de la Selección Chilena Sub 20

Julio Bórquez y Luis Ureta (derecha de la foto) pelearán por cuidar el arco nacional en el Sudamericano Sub 20.

A poco más de seis meses del Sudamericano se jugará en Chile, La Roja Sub 20 entró en su etapa final de preparación y en la pelea, puesto a puesto, por un espacio en el once titular. Una de las más atractivas es la lucha por el pórtico nacional, ya que cuenta con dos jugadores que estan unidos por la experiencia en torneos grandes, muchísimo talento y un vínculo de lealtad y amistad a toda prueba.


Esta es la historia común de Luis Ureta (O’Higgins) y Julio Bórquez (Deportes Iquique), los porteros que participan por estos días en la gira de la Selección Chilena juvenil por Uruguay y que llevan compartiendo hace varios meses en los trabajos del equipo de Héctor Robles rumbo a la cita continental.



BAGAJE MUNDIAL


Más allá de tener estilos de juegos similares (gran capacidad en el achique, consistencia en los balones aéreos y un vistoso juego con los pies, aspecto clave en arqueros modernos) ambos porteros tienen un punto común en sus cortas carreras: ambos fueron parte de nóminas mundialistas.


Ureta peleó por la titularidad hasta el final en la campaña de La Roja Sub 17 en Chile 2015, pero finalmente debió resignarse a la suplencia de Zacarías López (actual meta de Deportes La Serena). Bórquez, por su lado, fue “1” titular en la actuación nacional en India 2017 con la misma categoría. Experiencias valiosa que será puesta a prueba en enero de 2019.


“Más allá de lo que hemos hecho antes, el Sudamericano Sub 20 será el desafío más importante que hemos tenido como arqueros. Lo tomamos con toda la seriedad porque sabemos que estarán muchísimos ojos puestos en lo que hagamos. Jugaremos en Chile y no hay nada más lindo que representar a nuestro país acompañado de nuestra gente”, expresó “Junior” (segundo nombre de Bórquez, el que cariñosamente usan sus compañeros para referirse a él).


Por su parte, Ureta aseguró que “claramente tengo la espina clavada. Solo me queda trabajar acá para que se me dé la posibilidad de ser titular en el Sudamericano, pero para eso tengo que ganarle a un tremendo arquero como Julio. He adquirido mucha experiencia y tengo que usar esto a mi favor para hacer las cosas de buena manera, pero si termina jugando mi compañero sabe que tendrá todo mi apoyo. Lo que hemos crecido tiene que servirle al equipo y no verlo de forma egoísta”, consigna Luis Ureta.


Es importante destacar que la nómina final para el Sudamericano deberá contar con tres porteros. “El que llegue será bien recibido y tendrá que competir. Va a estar bonito”, coinciden ambos.


“¡POR EL PEYE!”


Corría el minuto 38’ del estreno de Chile en los Juegos Suramericanos de Cochabamba.  En la jugada del gol del argentino Exequiel Cañete (tanto que ponía la cuenta 2-1 en favor de los trasandinos en un partido de altísima intensidad), Luis Ureta recibe un fuerte golpe en la cabeza y pierde la conciencia.


Las miradas desde la banca estaban puestas en el caído meta chileno. Mientras este recibia antención médica, se escuchó la instrucción por parte del cuerpo técnico: “Apura el calentamiento, Junior. Tienes que entrar”.


 “No estaba preparado, uno nunca espera que pase algo así. Obviamente me preocupé, como todos los demás. Simplemente traté de hacer las cosas bien por Luis y por el equipo. Había que sacar ese partido adelante y lo conseguimos. Siempre estuvo en mi mente lo que le pasó a mi compañero y fue una motivación extra para poder jugar mejor”, confiesa el meta iquiqueño.


Con una excelente segunda mitad del equipo de Héctor Robles, Chile cosecharía su primer punto en Cochabamba con un peleado 2-2 en el inicio de la ruta que llevaría a La Roja Sub 20 a ganar una medalla de oro inédita para Chile. En la euforia del regreso hacia el camarín, propia de un equipo que remontó un partido adverso en varias facetas, se escuchó el grito de Bórquez, quien cuajó una gran performance individual: “¡Esto es por el Peye!”, en mención al cariñoso apodo con el que se refieren al meta ohigginiano.


Me siento feliz que mi compañero de posición me haya apoyado en un momento así de difícil y que haya tenido ese gesto conmigo. Obviamente, me da bronca no haber podido seguir jugando, pero me pone muy contento saber que Junior hizo las cosas bien y preocupado por mí. Eso habla de la relación que hemos ido creando”, recordó Ureta sobre una experiencia compleja, pero que a su vez estrechó aún más los lazos en el pórtico nacional juvenil.


CRECER Y HACER CRECER


Cada vez que entrena la Selección Chilena Sub 20, ver cómo trabajan sus arqueros es un espectáculo aparte. Los ejercicios que dirige el legendario ex seleccionado Óscar Wirth se realizan a un altísimo nivel, en el que ambos metas se observan y ponen a prueba constantemente. Sin embargo, entre ejercicio y ejercicio, aparecen de inmediato los estímulos mutuos y los consejos. En el fondo, se trata de mejorar y ayudar a mejorar.


Cuando un arquero anda bien, el otro también sube su nivel y eso es positivo para el equipo. Por ejemplo, si termina jugando Luis es porque está haciendo las cosas bien y porque yo lo estoy apurando para que ande mejor, o viceversa. Cada entrenamiento lo disfrutamos y nos exigimos al máximo”, dijo Julio Bórquez.


En medio de una cerrada disputa por ser el meta de la Selección Chilena Sub 20 en el Sudamericano, eso sí, se dieron las condiciones para generar un buen lazo de amistad y profesionalismo a pesar de sus cortas edades.


Siempre he tenido buena relación con mis compañeros arqueros, tanto en mi club como en la selección, y con Junior ha sido de la misma forma. Esto se trata de apoyarnos y hacernos crecer el uno al otro. Si me toca jugar a mí, yo que se Junior me va a apoyar y yo voy a hacer lo mismo por él”, declaró Ureta.


A su vez, Bórquez asegura que “Luis y yo competimos por un puesto y en la cancha lo damos todo, pero fuera de ella somos muy amigos. Siempre estamos comunicándonos por Whatsapp y sabiendo el uno del otro. Tenemos una relación muy bonita”, sentencia Bórquez.


TAREA COMÚN


Enero de 2019 es clave. El Sudamericano Sub 20 se jugará en Chile y será la gran prueba de esta generación de jugadores. Estos dos, así como el resto del plantel, tienen claro que la misión es tan grande como el premio: boletos para la Copa del Mundo de Polonia, objetivo compartido por cada uno de los miembros de esta selección. 


Partimos trabajando hace más de un año y ya estamos a pocos meses del Sudamericano, ha pasado muy rápido. Queremos hacer cosas importantes por nosotros, por el país y nuestras familias. En enero tenemos que usar todo lo que hemos trabajado para alcanzar el objetivo de ir al Mundial”, enfatiza Ureta.


Lo mismo piensa su compañero. “Somos un equipo y queremos triunfar juntos. Este grupo tiene el objetivo de llevar a Chile a un Mundial y para lograrlo tenemos que trabajar unidos, especialmente nosotros los arqueros, toque al que le toque jugar” sentenció Bórquez.

POR FABIO FIGUEIREDO M.
FOTOGRAFÍA: CARLOS PARRA / COMUNICACIONES ANFP
ENVIADOS ESPECIALES A MONTEVIDEO, URUGUAY


Etiquetado en:   Portada ,   Selecciones Juveniles ,