
La Selección Chilena Femenina Sub-17 finalizó su participación en el CONMEBOL Sudamericano de la categoría con una victoria por 3-0 ante Perú, en el Estadio Francisco Rivera Escobar de Palmira, Colombia.
Con goles de Nicole Carter y un doblete de la capitana Antonella Casas-Cordero, las dirigidas por Vanessa Arauz salieron al campo con determinación y carácter, a pesar de ya no contar con opciones de clasificar al Mundial. El equipo demostró compromiso hasta el final, logrando un sólido cierre del torneo incluso con nueve jugadoras en cancha durante los últimos minutos del encuentro.

La Roja juvenil femenina comenzó su camino en el CONMEBOL Sudamericano en la ciudad de Manizales, donde logró el tercer lugar del Grupo A, lo que le permitió avanzar al hexagonal final entre las seis mejores selecciones del continente, lo que además, marcó el regreso de Chile a una fase final de esta categoría después de tres años.
Un hecho histórico se produjo en el empate 2-2 frente a Brasil en el hexagonal final, donde la Roja Sub-17 logró anotar dos goles al combinado brasileño, consiguiendo así sus primeros tantos ante este rival en la categoría, en lo que fue su cuarto enfrentamiento oficial.
En la fase final, el equipo nacional sumó cinco puntos, fruto de una victoria, dos empates y dos derrotas, lo que le permitió finalizar en el quinto lugar de la tabla general. Más allá de los números, este torneo deja la sensación de un grupo con proyección, que luchó con corazón y mostró que Chile está cada vez más cerca de competir de igual a igual con las potencias del continente.

Al respecto, la DT Vanessa Arauz destacó el balance positivo que dejó la campaña del combinado juvenil: “Dentro de todo, la verdad es que fue una muy buena experiencia. Nos deja un buen aprendizaje. Las jugadoras pelearon cada partido y enfrentamos a rivales a los que, hasta hace algunos años, no se les había podido ganar como Colombia o Brasil. Estuvimos de igual a igual con rivales que siempre han llevado una jerarquía sobre nosotros“.











